Primero explicar que la genética determina como será nuestro cuerpo, que nosotros tenemos un
potencial de crecimiento genético, pero luego los factores externos que nos rodean y nos pueden
influir, haciendo que el crecimiento determinado genéticamente se desarrolle con normalidad o no.
La función hace la forma, si un elemento de nuestro cuerpo funciona se desarrollará con normalidad, si
no funciona, se pude atrofiar, deformar y quedarse más pequeño. Esto nos ocurre con nuestros
maxilares.

Las funciones vitales que afectan al desarrollo del tercio medio facial, es decir maxilares y mandíbula,
son:

1. La Respiración, es de vital importancia, para la salud en general y de nuestra boca en particular,
debe ser por la nariz, y no por la boca.
Para esto debe existir un correcto sellado labial, tanto diurno como nocturno. Este sellado hace
que exista más saliva en la boca con lo cual mejor protección contra las caries y la salud de
nuestras encías.
Y también influye notablemente en el desarrollo de los maxilares. Si la respiración es bucal, la
lengua está baja para que pase el aire y no realiza la presión necesaria en el maxilar superior
para que éste se desarrolle con normalidad. Por otro lado, el paso de aire por la nariz también
hace que los senos maxilares se desarrollen y por consecuencia los maxilares.

2. La deglución,
Para tragar correctamente debemos usar solo la lengua con movimiento ondulante hacia atrás
presionando el paladar. Hay veces que la deglución infantil permanece en el tiempo. Uno de los
factores que puede influir es el uso de biberones o similares.
En la deglución infantil, el sellado lo hacen uniendo el labio inferior con la lengua, de tal
manera que éstos se interponen entre los dientes. Tragamos muchísimas veces al día, lo que
puede alterar la relación maxilar dejando mordidas abiertas o resaltes (aumento de la distancia
de incisivos superiores e inferiores).

3. La masticación,
La masticación debe ser bilateral y alternante. Y con alimentos duros y fibrosos.
Para que esto se produzca con eficacia se debe poder lateralizar la mandíbula hacia los lados,
este movimiento es el que nos ayuda al desarrollo óseo de los maxilares.
En algunas ocasiones, a conformación de los dientes, nos impide una correcta masticación.
Puede aparecer una masticación unilateral, y con esto desarrollar asimetrías óseas, o limitar el
movimiento masticatorio lateral, causando poco desarrollo maxilar.
Por ello en conformar lo antes posible la boca de una forma fisiológica es muy importante para
la correcta función y por lo tanto para el desarrollo óseo adecuado.

Los hábitos son un factor también muy importante que nos afecta en la forma y desarrollo óseo y
dental, el chupete o biberones de uso prolongado, succiones de labio. etc.

Por ello creemos que es muy importante que todos los factores explicados funcionen correctamente con
prevención o si ya existe alteración, interviniendo lo antes posible, para dar normalidad al desarrollo de
maxilares y que se puede desarrollar todo su potencial de crecimiento (aunque sabemos que a veces no
es suficiente, pero cuantos menos factores nos lo impidan menor será el problema futuro).